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En 1957, el año en que la Región Oriental de Nigeria obtuvo su autonomía, la Iglesia Católica Romana entró en la política de partidos en Igboland, abandonando su antiguo confort de silencio. La Iglesia Católica Romana vio en las elecciones de la Región Oriental de 1957 un parteaguas para reducir la ascendencia de la confesión protestante en la política del país. Se presentaba así lo que parecía un escenario de lucha por el poder: los católicos romanos trabajando asiduamente para que sus miembros fueran elegidos en los escaños y cargos del Gobierno de la Región y los protestantes, que habían dominado la escena política de la Región, esforzándose por mantener el statu quo. En las elecciones de 1957, 1959, 1961 y 1964, los protestantes participaron activamente en diferentes niveles de la política y las campañas. Aunque la política de la Segunda República del país y sus sucesores se rigieron por una nueva grundnorm nacional que prohibía constitucionalmente a las Iglesias la política de partidos confesionales, la Iglesia siguió siendo políticamente relevante y activa en las elecciones de 1979, 1999 y 2003. En estas elecciones, se dedicaron a la supervisión y observación de los presupuestos y las elecciones, a las publicaciones en los medios de comunicación, a los simposios, a las homilías y a la ilustración general del electorado.
A propos de l'auteur
Jonas O. Eze es profesor del departamento de Historia y Estudios Internacionales de la Universidad de Nigeria Nsukka. Se doctoró en historia política por la Universidad de Nigeria. También es abogado, y ha sido autor de numerosos libros.
