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Este libro está dedicado para aquellos que piensan tener vocación de llegar a ser Sacerdotes católicos.
El libro carece de fuentes citadas y se basa únicamente de la experiencia del autor más allá que pueda citar alguna anécdota, frase de fuentes que alguna vez leyó.
El autor es un Sacerdote de varios años de ministerio con una vida "vivida" de un instante que considera "eterno" y del cual vuelve una y otra vez su vista y su consideración. Ese momento fue la llamada a su vocación sacerdotal.
El autor estaba por finalizar sus estudios secundarios cuando "se topó" con este mensaje silencioso, es más, mudo como quien, desde el otro lado, pidiese un incondicional "sí". Una llamada que entró por el raciocinio y ganó rápidamente el corazón, el alma, la voluntad.
Este Sacerdote confiesa que vive su vida sacerdotal del manantial de esta vocación hace ya más de veinte años. Esta vocación siempre joven a pesar de que los años transcurran y la vida siga su curso envejeciendo todo lo que tiene "gusto a tiempo", a temporalidad.
Este Sacerdote descubrió que esta vocación no tiene "gusto a tiempo" sino "gusto a eterno". El Sacerdote vive de esta eternidad en medio del tiempo de su persona.
Hay "Alguien" que se introdujo en ella respetando, con una exquisita educación de maneras divinas y no humanas, su libertad que permanece valga la redundancia, siempre libre.
El Sacerdote confiesa que tiene la necesidad de escribir este libro por esta razón y también por otra que es la siguiente: muchos pueden sentir esta vocación, pero puede ser que, debido al mundo de hoy, quede ininteligible.
El mundo se está asfixiando de temporalidad y le falta el oxígeno de lo sobrenatural. De allí la necesidad de este libro. Una bocanada de sobrenaturalidad para que no se ahoguen las reiteradas llamadas a esta altísima vocación que puedan sentir los jóvenes.
El candidato encontrará en este libro, dos cosas: primero, elementos que no cambian y que pueden ayudarlo. Segundo, elementos que son del momento presente, del mundo y la Iglesia que nos toca vivir en este siglo.
El autor no busca ser florido en el estilo sino más bien directo. Corto de frases. Algunas veces será riguroso en sus juicios y expresiones, pero un candidato inteligente que se siente llamado a esta vocación, le agradecerá enormemente estos atrevidos consejos. Es el estilo que buscan los jóvenes llamados a esta vocación.
Pongamos este modesto libro dentro del Corazón ardiente de Nuestro Señor, para que, en este crisol, lo forje y llegue a ser una válida empuñadura en la batalla que afrontará el alma joven llamada a una tan alta vocación como es el llegar a ser Sacerdote del Dio vivo...
