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La inspección técnica de vehículos lleva más de 50 años en vigor en Nueva Zelanda y se lleva a cabo en centros de inspección independientes o pequeños talleres privados autorizados. Sin embargo, en 2014, el Gobierno neozelandés decidió introducir cambios en la normativa sobre inspección técnica de vehículos basándose en la fiabilidad de los vehículos fabricados a partir del año 2000. El Gobierno alega un ahorro para los conductores de al menos 160 millones de dólares al año, además de las ventajas añadidas de que la nueva frecuencia de las inspecciones WOF reduciría las obligaciones reglamentarias de los propietarios de vehículos, lo que supondría un ahorro considerable en gastos y tiempo. Para los empresarios, la nueva normativa tendría un impacto financiero y de gestión que afectaría especialmente a los pequeños talleres debido al cambio en la frecuencia de las inspecciones WOF.
About the author
Zelalem Workneh, magister zarz¿dzania, uköczy¿ studia w 2016 r. i obecnie pracuje w Unitec jako wyk¿adowca i technik w niepe¿nym wymiarze godzin. Dodatkowo od kilku lat pracuje w bran¿y kontroli pojazdów w Nowej Zelandii jako inspektor przegl¿dów technicznych.
