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¡En ninguna circunstancia una mentira puede sustituir a la verdad! En cuanto a la verdad, nunca admite contradicciones, ya que es justa y encarna la justicia, y desaprueba totalmente la hipocresía y la mentira. En el pasado, los hombres eran soñadores y viajeros, y a través de los viajes aprendieron muchas cosas sobre el mundo. Al adquirir más experiencia, el hombre se convirtió en pensador y filósofo, indisociable de la Tierra y la naturaleza, y vivía en armonía y tranquilidad. En comparación con el hombre moderno de hoy, que se ha eclipsado y dominado por completo por esta mentira. En este mundo imaginario, el hombre se ha visto completamente confinado por múltiples barreras y fronteras y varios impedimentos que se le imponen con el pretexto de 'herramientas de protección'. Se le imponen trabas indebidamente, solo para prohibirle su libertad, la que le permitiría descubrir y conocer mejor este mundo. Medidas restrictivas por las que los hombres se han visto confinados de forma imperativa por países, ciudades o regiones e incluso por departamentos. Ante este dilema, el hombre se paraliza y se queda perplejo, su pensamiento se ha congelado por completo.
About the author
Haddab Mohamed, 55 años. Un simple investigador de la historia de la humanidad y de las civilizaciones antiguas. Investigador en astronomía y arqueología.