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El tratamiento de la obesidad se ha desarrollado considerablemente en los últimos años gracias a nuevos tipos de medicamentos como Wegovy, Saxenda, Ozempic, Monjaro, Rybelsus, Mysimba, Contrave, Belviq etc.. En su mayoría afectan a los receptores que regulan el apetito y el metabolismo y han ayudado a muchos pacientes a reducir su peso. La próxima generación de fármacos contra la obesidad, como la tirzepatida, un agonista de doble receptor, promete un éxito aún mayor. En ensayos clínicos, la tirzepatida ha mostrado resultados impresionantes en la reducción de peso. Permite regular mejor el metabolismo y el apetito, lo que conduce a una pérdida de peso aún mayor. Además del desarrollo de nuevos medicamentos, también está la cuestión de los genéricos baratos para los principios activos existentes. Los genéricos contribuyen a que los tratamientos eficaces sean accesibles a una población más amplia. Un ejemplo es la liraglutida, el principal ingrediente de Saxenda. Como este medicamento ya está disponible como genérico, el coste del tratamiento podría reducirse pronto de forma significativa. Esto es especialmente importante, ya que muchos de los medicamentos para adelgazar son caros y su acceso es limitado para muchos pacientes. Los futuros tratamientos farmacológicos podrían centrarse en dianas novedosas, como el receptor de melanocortina-4, que desempeña un papel importante en la regulación del gasto energético y la ingesta de alimentos. La investigación sugiere que dirigirse a este receptor podría conducir a terapias de pérdida de peso aún más sostenibles y eficaces. Otro enfoque prometedor es la medicina personalizada, en la que los tratamientos se adaptan a los perfiles genéticos y metabólicos individuales de los pacientes. Esto podría mejorar significativamente la eficacia de las terapias de adelgazamiento al adaptar los tratamientos específicamente a las necesidades biológicas del individuo. Los pacientes con dificultades para perder peso debido a predisposiciones genéticas podrían beneficiarse especialmente de estos enfoques personalizados. La combinación de nuevos fármacos, la disponibilidad de genéricos y las terapias personalizadas sugiere que el tratamiento farmacológico de la obesidad podría ser cada vez más individualizado y accesible en los próximos años. Esto supondrá un avance significativo en la lucha contra la epidemia mundial de obesidad. (Estado de tramitación: octubre de 2024)
