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La popularización del terror como género artístico no es un fenómeno actual en nuestra sociedad. Desde su aparición como género -a través del teatro, las artes visuales y en la gran pantalla- el horror, ya sea a través de la violencia de la muerte, la persecución de monstruos o el acceso al mundo de los espíritus, ha recorrido nuestros miedos y ansiedades más profundos, intrigando a sus espectadores más diversos. En esta investigación, examinaremos la relación entre la estética del terror cinematográfico en el siglo XXI y la transformación de la sensibilidad y la memoria contemporáneas, a partir de los estudios de Walter Benjamin sobre los efectos de choque desde la Modernidad. Estas transformaciones afectarán al modo en que los sujetos sienten, perciben, recuerdan y olvidan en la actualidad. Problematizaremos la estética de un nuevo tipo de cine de terror, que presenta una mayor intensidad de violencia que las películas producidas en el siglo XX, tanto en el contenido como en la forma, así como la relación que se establece entre el espectador y las imágenes, y el porqué de la progresiva demanda de este tipo de productos por parte de los espectadores.
About the author
Es licenciada en Comunicación Social, con especialización en Cine, por la PUC-RIO (2011). Tiene experiencia en el campo de la Comunicación, con énfasis en Cine. Maestría en Memoria Social por la UNIRIO (2014). Actualmente cursa el Doctorado en Memoria Social en UNIRIO (2018). Investiga principalmente las transformaciones de la subjetividad a través de los medios contemporáneos.
