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Muchos malienses y nigerianos huyeron de los combates y la violencia que se estaban produciendo principalmente en las zonas de Ménaka y Anderamboukane, en el noreste de Malí. El número total de personas que cruzaron la frontera se estimó en 57.618, incluidos 54.546 malienses y 3.072 nigerianos a 3 de septiembre de 2012. La mayoría de las personas que huyeron de los ataques y las represalias habían cruzado la frontera maliense a pie, en carretas o en burros, en condiciones difíciles, sin provisiones y sin acceso a agua potable y alimentos. Esta situación de crisis ha creado enormes necesidades humanitarias y ha aumentado la vulnerabilidad de las poblaciones refugiadas. Estas necesidades incluyen protección, educación, alojamiento, alimentos y artículos no alimentarios, salud, nutrición y acceso al agua, la higiene y el saneamiento. La crisis es también un factor agravante de la crisis alimentaria y nutricional.
About the author
Fouréra Abdou Mani é especialista em nutrição e segurança alimentar; gestão de projectos de emergência e desenvolvimento sustentável. Tem um mestrado em política e prática de desenvolvimento e um doutoramento em ciências da nutrição pela Atlantic International University. Tem 10 anos de experiência na implementação de projectos de emergência e desenvolvimento.
