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La demanda de agua dulce es cada vez mayor debido al crecimiento de la población mundial, que conlleva una mayor demanda de agua dulce para fines agrícolas e industriales. Sin embargo, la disponibilidad de agua dulce en la Tierra es limitada y muchos países se enfrentan a una grave escasez de agua. La desalinización del agua podría ser una posible solución a este problema. Entre las diversas tecnologías de desalinización de agua existentes, hay tres especialmente prometedoras: la ósmosis inversa (OI), la destilación flash multietapa (MSF) y la destilación multiefecto (MED). El consumo de energía de los procesos de desalinización viene determinado por factores como la capacidad de la planta desalinizadora (pequeña, mediana o grande), la fuente de energía (eléctrica o térmica), el tipo de agua de alimentación (salobre o de mar), el método de desalinización (térmico o de membrana), el uso de fuentes de energía renovables (solar, eólica o geotérmica) y la necesidad de pretratamiento de la alimentación (mecánico o químico). En este artículo, comparo el consumo total de energía de los distintos métodos teniendo en cuenta cada factor influyente y clasificando las técnicas de desalinización existentes.
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Mein Name ist Martun Antonyan und ich komme aus Armenien. Vor kurzem habe ich meinen Master-Abschluss an der Universität Twente im Bereich Bauingenieurwesen gemacht. Mein Profil ist das integrierte Wasserressourcenmanagement.
