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Desde el lanzamiento oficial de la CEMAC, el 25 de junio de 1999, los Estados miembros se han fijado el gran objetivo de construir un mercado común y competitivo. En cuanto a la financiación de la economía, los mercados financieros parecen ser la mejor solución para movilizar el ahorro con el fin de financiar los proyectos de desarrollo necesarios para el despegue de la subregión. Sin embargo, este noble objetivo de financiar la economía a través del mercado también conducirá a la delincuencia bursátil en la comunidad de la CEMAC, planteando así la cuestión de la protección de quienes invierten sus fondos. Así, el inversor víctima de una infracción bursátil en la zona CEMAC dispone de una serie de recursos para reparar su pérdida, pero también para sancionar al responsable de la misma. Así, la reparación, el medio tradicional de que disponen las víctimas del mercado de valores, parece ineficaz debido a la rigidez de sus condiciones de aplicación. El recurso a los tribunales penales para la represión, que se supone que compensa estas deficiencias, es en sí mismo ineficaz.
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BANDOLO François Xavier, estudiante de doctorado en derecho privado en la Universidad de Yaoundé II en Camerún.
