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Mozambique, como todas las antiguas colonias, trató poco después de su independencia en 1975 de seguir caminos que pudieran conducir a la autonomía económica. Durante doce años, de 1975 a 1987, Mozambique abrazó una economía socialista caracterizada por la planificación centralizada, con la agricultura como motor del desarrollo rural. Como resultado de los fracasos de este modelo, junto con los errores y excesos, a partir de 1987 el país dio un giro a su política económica al adoptar la economía de mercado como una tabla de salvación superficial para la economía ya empobrecida. El proceso de descentralización trajo consigo nuevas iniciativas de desarrollo dirigidas al campo, en las que se da prioridad a la participación de las comunidades en el proceso de planificación. Sin embargo, la planificación participativa como proceso tiene muchos beneficios y garantiza una mejor satisfacción de los intereses de las poblaciones que el modelo centralizado, sin embargo, continúa la falta de confianza, la planificación participativa crea una mayor satisfacción y confianza de las autoridades dentro de las comunidades.
About the author
Paulo Domingos Bene nació el 8 de agosto de 1967 en el puesto de Bajone en la provincia de Zambezia, Mozambique. Tiene una maestría en Desarrollo Rural y un doctorado en Proyectos. Es profesor universitario e investigador del Centro de Desarrollo Comunitario de UniLicungo, consultor y director del Centro de Investigación y Consultoría.
