Read more
Informationen zum Autor Yanitzia Canetti es la presidenta de Cambridge BrickHouse, Inc. Yanitzia se desempeña como consultora literaria, escritora y traductora para las principales editoriales. Experta tanto en libros para el mercado general como para el sector educativo, es la autora de más de 500 libros. En el 2011, fue elegida por la revista People en español como una de las 25 Mujeres Hispanas Más Poderosas del Mundo. Yanitzia Canetti is the head of Brickhouse Learning. Yanitzia works as a literary consultant, writer, and translator across all major publishing houses. An expert in both the trade and educational markets, she has published over 500 books in Spanish. In 2011, she was selected by People magazine as one of the 25 Most Powerful Hispanic Women of the World. Klappentext "On June 26, 2018, twenty-eight-year-old Alexandria Ocasio-Cortez, a bartender from New York City, became the youngest woman ever elected to serve on Congress. Her win shocked the political world and she became a celebrity overnight. Soon, everyone knew her by her initials: AOC. As soon as she was sworn into office, AOC became a vocal champion for healthcare for all and the fight against climate change. This exciting story details the defining moments of what led to her victory and all the monumental ones since that have shaped her into a smart politician willing to fight for others, the environment, and the future of America"-- Leseprobe ¿Quién es Alexandria Ocasio-Cortez? Alexandria Ocasio-Cortez parecía una candidata con pocas probabilidades para enfrentarse a Joseph Crowley, uno de los demócratas más poderosos de Nueva York y del Congreso. Sin embargo, la mesera de veintiocho años del Bronx quería marcar la diferencia. Creía apasionadamente que todos debían tener atención médica y que el cambio climático era la batalla más urgente de nuestro tiempo. Ella había caminado por los barrios de Queens y del Bronx, tratando de convencer a la gente de que era hora de un cambio. Pensaba que era el momento de que sus vecindarios estuvieran representados por alguien que realmente viviera en su distrito, no en Washington, DC, y que ya era hora de ser representados por alguien que se pareciera más a ellos. Ella sabía lo que era trabajar duro todo el día, porque lo había hecho en los restaurantes de Manhattan. Alexandria, Alex para sus amigos, era una joven latina de clase trabajadora de una de las áreas de mayor diversidad étnica de la ciudad de Nueva York. La noche del 26 de junio de 2018, Alex no esperaba ganar la elección primaria. La mayoría de la gente pensaba que ella no tenía ninguna oportunidad. En uno de sus debates, Crowley incluso la felicitó por traer “nueva energía” a la contienda, como si el resultado ya hubiera sido decidido. Nadie se había molestado en presentarse contra el representante Crowley durante los últimos catorce años. Y ahora eran casi las 9:00 p. m. La votación había terminado. Alex se sentó en el asiento trasero de un coche y se preparó para ver cómo su campaña por un escaño en la Cámara de Representantes de EE. UU. había llegado a su fin. El novio de Alex, Riley Roberts, estacionó el auto. Comenzaron a caminar hacia la fiesta de campaña. Se gane o se pierda, la mayoría de los trabajadores de campaña se reúnen en la noche de una elección para esperar los resultados y celebrar, incluso si se trata solamente del arduo trabajo realizado. Mientras pasaban por unos grandes ventanales del salón de billar donde estaban festejando, Alex vio televisores reproduciendo las noticias. Ella gritó y corrió hacia la puerta principal. El guardia de seguridad intentó detenerla. Alex señaló un cartel de campaña y gritó: “¡Soy yo! ¡Soy yo! ¡Esa soy yo en el póster!”. Él se hizo a un lado y ella corrió hacia adentro. La multitud rugía y vitoreaba. Alex jadeaba y se llevó la mano a la boca mientras miraba hacia arr...