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Las cenizas volantes son un residuo industrial procedente de las centrales eléctricas de carbón. Su eliminación supone un problema. Cada año se generan cerca de 75 millones de toneladas de residuos sólidos. Las cantidades de contaminantes que entran en el medio ambiente como resultado del uso del carbón aumentan con el crecimiento constante de la cantidad de carbón que se utiliza. La generación de energía eléctrica requiere grandes cantidades de carbón de diversa calidad; por lo tanto, no es posible ignorar los elementos traza y tóxicos presentes en el carbón. El impacto medioambiental de las emisiones del carbón no solo está relacionado con la cantidad emitida, sino también con el estado químico y físico de los elementos emitidos. Existen opiniones divergentes sobre el uso de las cenizas volantes en la agricultura. Las cenizas volantes contienen elementos tóxicos como plomo, zinc, antimonio y arsénico, que inhiben el crecimiento de los cultivos. Las partículas de cenizas volantes presentes en el aire llegan al tracto gastrointestinal y a los pulmones, y provocan asma y enfermedades pulmonares relacionadas. Sin embargo, los últimos trabajos sobre las cenizas volantes en los campos de cultivo revelan resultados importantes, ya que se ha demostrado que las cenizas volantes son de naturaleza básica.
Über den Autor / die Autorin
Dr Shweta Sao pracuje jako profesor nadzwyczajny na Wydziale Nauk Przyrodniczych Uniwersytetu im. dr. C. V. Ramana w Kota Bilaspur. Jej badania koncentruj¿ si¿ na "Wp¿ywie popio¿u lotnego i hormonów wzrostu na plony ro¿lin oleistych w stanie Chhattisgarh (Arachis hypogaea)". Opublikowäa ponad 26 artyku¿ów w renomowanych czasopismach.
